¿Qué es la prescripción de deudas bancarias?
La prescripción de deudas bancarias es el plazo legal que tiene una entidad financiera para exigir el pago de una deuda contraída por una persona o empresa. Una vez transcurrido este plazo, la entidad financiera ya no puede exigir el pago de la deuda y el deudor ya no está obligado a hacerlo.
¿Cuál es el plazo para la prescripción de una deuda bancaria?
El plazo de prescripción de deudas bancarias depende de la legislación del país en el que se encuentre la entidad financiera y del tipo de deuda en cuestión. Por ejemplo, en algunos países el plazo de prescripción para deudas bancarias puede ser de 15 años, mientras que en otros puede ser de 20 años o más. En algunos casos, el plazo de prescripción puede variar dependiendo de la forma en que se ha contratado la deuda, como por ejemplo a través de un préstamo personal o una tarjeta de crédito.
Es importante tener en cuenta que la prescripción de deudas bancarias no implica que la deuda desaparezca automáticamente una vez transcurrido el plazo. Si bien la entidad financiera ya no puede exigir el pago de la deuda, el deudor sigue siendo responsable de ella y puede optar por pagarlas voluntariamente. Además, la prescripción no afecta a otras responsabilidades legales que puedan estar vinculadas a la deuda, como el pago de intereses o la inclusión en ficheros de solvencia patrimonial.
Es importante tener en cuenta que la prescripción de deudas bancarias no es un proceso automático. Es decir, la entidad financiera no dejará de exigir el pago de la deuda una vez transcurrido el plazo de prescripción sin más. Es necesario que el deudor interponga una demanda judicial para que se declare la prescripción de la deuda y se ponga fin a la obligación de pagar.
En algunos casos, la entidad financiera puede intentar evitar la prescripción de la deuda mediante distintas acciones, como enviar cartas de recordatorio o realizar llamadas telefónicas. Es importante tener en cuenta que estas acciones no interrumpen el plazo de prescripción y que, una vez transcurrido este plazo, la entidad financiera ya no puede exigir el pago de la deuda.
Conclusión:
En el caso de deudas bancarias, es fundamental mantener una comunicación fluida con la entidad financiera y tratar de llegar a un acuerdo para regularizar la situación. Es por eso que tienes a tu mano, la ayuda de nuestros abogados especialistas en deudas bancarias.